Con un lleno total en el Teatro Caupolicán, el legendario cantautor belga-italiano Salvatore Adamo volvió a demostrar por qué sigue siendo uno de los artistas más queridos por el público chileno.
El concierto comenzó cerca de las 20:30 horas con la emblemática canción “Es mi vida”, marcando el inicio de una velada cargada de emoción, recuerdos y complicidad entre el artista y sus seguidores.
Durante más de dos horas, Adamo recorrió una variada selección de su extenso repertorio, coreado de principio a fin por un público que no dejó de cantar ni un solo verso. En varios pasajes, los fans se acercaron al escenario para tomarse fotografías, selfies y entregarle regalos, gestos que el cantante recibió con calidez y gratitud.
La jornada tuvo un prólogo de lujo con la presentación de José Alfredo Fuentes, quien fue el encargado de abrir la noche interpretando sus temas más populares. El “Pollo” deleitó a los asistentes con la simpatía y energía que lo caracterizan, preparando el ambiente para la esperada salida de Adamo.
El reencuentro de estas dos leyendas sobre un mismo escenario podría concretarse nuevamente este domingo 26 de octubre, cuando Adamo vuelva a presentarse en el Teatro Caupolicán. Ambos han expresado su entusiasmo ante la posibilidad de compartir una canción, algo que sería histórico para sus seguidores.
“Mi comunión con el público chileno es más profunda que en otros lugares”, confesó Adamo, recordando su primera visita al país, motivada por las fervorosas admiradoras que en su momento desfilaron por las calles pidiendo su presencia.
Por su parte, José Alfredo Fuentes manifestó “Adamo es un compositor completo. Sus melodías y letras son geniales, y logra una originalidad impresionante”, quien también recordó con humor las “batallas de pompones” que protagonizaban los fans clubs de ambos en los años sesenta. Esta sexta visita de Adamo a Chile reafirma el vínculo excepcional que mantiene con su público local, una relación cimentada en la emoción, la nostalgia y el cariño mutuo.